A finales del siglo XIX el gobierno de Porfirio Díaz se dedicó afanosamente a obtener el reconocimiento internacional en términos Morales por lo tanto fue imprescindible obtener un lugar que permitiera al país desprenderse del término “bárbaro” utilizado por las naciones europeas al referirse a México en el siglo XIX.
Hacia finales de dicho siglo las exposiciones internacionales se convirtieron en el escaparate de la modernidad. Así , la presencia mexicana en la exposición de 1893 en Chicago, destacó con la “Comisión Mexicana para la Mujer “ posterior en París en la feria de 1900 el pabellón mexicano despidió el sigo con alegría de la guerra de Independencia y del glorioso periodo de la Reforma, Así como con el símbolo de progreso LA LUZ ELECTRICA . En las exposiciones posteriores de Búfalo y San Luis Missouri el gobierno de Días elevó con éxito la bandera del indigenismo prehispánico.
El General Díaz “Héroe” El creador del México moderno el llevo al país a un estado de progreso que en aquel entonces no superaba a ningún país de Latinoamérica, Gran estadista, trabajador que amo a su país o “Villano” por construir su poderío en la inconstitucionalidad con lo cual la republica se cubrió de pesares y defectos perdiendo solidez y equilibrio.
El simple hecho de que los resto del General Díaz sigan en París es porque México no acepta aún su legado de una de la figuras más importantes en la historia de México
acueducto Queretaro
